miércoles, 12 de mayo de 2010

Tendencias Suicidas


En definitiva atraigo a los drogadictos, pobres, y borrachos.
Vi una mujer que se tambaleaba como mi perra enferma de anemia. “¿No compra chicles joven?”. Pensé en ignorarla. “Gracias, otro día” dije, y voltee tratando de ignorar su hedor.

Carajo, si tan solo trajera dinero en mi bolsillo siempre, no me atacarían estas malditas ganas de golpear a un chapita y robarle la ganancia del día.

Dame un cigarro, le dije a la caja cargando al moreno.
-¿De donde eres?
-San Juan Chamula, joven.
-¿Y que haces aquí?
-Trabajando, señor.
-Te doy cincuenta pesos si me das una mamada.
-No señor, yo no le hago a eso.
-Mámame la verga o te parto tu sacrosanta madre a putazos.
-Señor, no me hable así. Tenga la cajetilla, pero déjeme en paz.
-Así me gustan, pendejos.

mayan textile

No hay comentarios: